La fibra submarina tendrá una extensión de 8 mil 700 kilómetros y se espera que esté en servicio en el cuarto trimestre de 2025.
Alcatel Submarine Networks, Elettra, Medusa y Orange firmaron el contrato para la construcción de Medusa, el cable submarino de 8 mil 700 kilómetros que conectará el Mediterráneo oriental y occidental con el Océano Atlántico, creando un nuevo corredor desde Asia hasta el Atlántico.
La fibra submarina establecerá conexiones entre Marruecos, Portugal, España, Francia, Argelia, Túnez, Italia, Grecia, Chipre y Egipto. Al interconectar directamente Europa y África, Medusa contribuirá a cerrar la brecha digital de todo el Mediterráneo. La construcción ha sido adjudicada a Alcatel y Elettra Tlc, que iniciará las operaciones de inspección. Orange proporcionará infraestructuras de aterrizaje en Francia, Túnez y Marruecos; el subsistema Vía Túnez, parte de Medusa Cable, que une Francia y Túnez, está cofinanciado por la Unión Europea en el marco del programa Connecting Europe Facility (CEF).
El Medusa se basa en tecnología de cable abierto de fibra óptica de 24 pares de última generación para cumplir con los crecientes requisitos de banda ancha en la región, con una capacidad mínima de 20 Tbps por par de fibra. La instalación está prevista para 2024 y 2025.
“Llevamos más de tres años trabajando para llegar a este punto y estamos tremendamente agradecidos a todos los que, desde las primeras etapas, apoyaron a Medusa: empresas colaboradoras e instituciones europeas. Gracias al apoyo de Operadores del Norte de África, instituciones financieras y empresas líderes como ASN, Elettra Tlc, Orange y AFR-IX Telecom, Medusa estará en servicio el cuatro trimestre de 2025”, sostuvo Norman Albi, CEO del operador de infraestructuras submarinas Medusa.